DAJCZER TADEUSZ El poder de la fe

 Introducirnos en el contenido de las meditaciones del padre y profesor, apoyadas en la revelación, el Magisterio de la Iglesia y los dichos de santos, confirmamos que la presencia eucarística de Cristo no es un simple recuerdo sino la «actualización» viva y real de la presencia del Señor entre nosotros. Es la garantía de que el Espíritu Santo se ha quedado para siempre, incesantemente, entregado en la Liturgia eucarística, para que el pan y el vino se conviertan en el Cuerpo y la Sangre de Cristo: Él es el mismo Espíritu Santo que descendió sobre María y los Apóstoles (He 2,14) y los envió a todas las naciones para anunciar la palabra de Dios y hacer discípulos reuniendo al Pueblo de Dios en la «fracción del pan» (cf He 2,42). «Haced esto en memoria mía» (Lc 22,19).