RUIZ FREITES GONZALO El hombre no separe lo que Dios ha unido


 En el contexto moderno, marcado por grandes cambios culturales que suscitan nuevos debates sobre el matrimonio y sobre la familia, un estudio de teología bíblica sobre este tema es de gran actualidad. La Divina Revelación, en efecto, tiene por objeto la inmutable verdad sobre Dios, pero también la verdad sobre el hombre y sobre lo que constituye su salvación, como enseña el Concilio Vaticano II: “Mediante la revelación divina quiso Dios manifestarse a Sí mismo y los eternos decretos de su voluntad acerca de la salvación de los hombres, ‘para comunicarles los bienes divinos, que superan totalmente la comprensión de la inteligencia humana’”.