Contrariamente al veganismo, el vegetarianismo (el simple hecho de no comer carne) existe desde hace milenios en las sociedades occidentales. Su práctica ha sido teorizada por grandes filósofos. Desde la Antigüedad, numerosos pensadores han argumentado en favor del vegetarianismo, apoyándose en la idea de que sería inmoral comer carne muerta. Pitágoras (siglo VI a. C.), que creía en la metempsicosis, es decir, en la transmigración de las almas entre diferentes cuerpos tras la muerte, se oponía fervientemente a los sacrificios religiosos de animales.