SAN AGUSTÍN, Obras completas tomo 40

 Agustín, en su existencia humana, vive siempre abierto hacia los demás. En realidad, no puede estar nunca solo, ni para lo bueno ni para lo malo. Ya desde niño actúa en compañía, porque «solo —dice— no actuaría» ; y arrastra y es arrastrado, comunicándose sus ideales y sentimientos como amigo leal de sus amigos en Madaura, en Tagaste, en Cartago, en Roma, en Milán, de nuevo en Tagaste, en Milán y Cartago. Cada paso que da, cada hallazgo que hace, es para comunicarlo e identificar consigo a sus amigos y discípulos.
Así, cuando se inquieta y lucha para encontrar la verdad, quiere que todos sus amigos sean como él; y trabaja por atraer a cuantos puede. Cuando descubre 1 a dummación de h sabiduría en el Hortensio quiere que los que están con él, los que lo siguen y lo admiran, no se dejen atrapar por las inquietudes y valores materiales, caducos y terrenos.