Encontramos en los evangelios bastantes momentos en donde Jesús rectifica o cambia la ley mosaica. Se enfrenta con los fariseos o los escribas y les indica que no han sabido entender la ley de Dios respecto al sábado, a la misericordia, al perdón, o a otros varios aspectos de la ley.
El evangelista san Mateo recoge, en el quinto capítulo de su evangelio, el famoso
«Sermón de la montaña». En ese capítulo, después de las bienaventuranzas, Jesús sigue hablando y puntualiza la doctrina antigua, utilizando con frecuencia la frase pero yo os digo…