El Opus Dei es una maifestación del vivir cristiano, una forma de encarnación y de irradiación del Evangelio. Les recuerda a personas de todas las condiciones, credos y culturas que Dios las llama a ser hijos suyos —santos y apóstoles— en medio del mundo, en el entramado de las actividades laborales, familiares y de interacción social.
Esta misión tiene un componente carismático que conduce a su origen. Su fundador, Josemaría Escrivá de Balaguer, se sintió interpelado por Dios para transmitir un mensaje espiritual y universal que engarzaba con los primeros cristianos y que expresaba la vitalidad de la Iglesia.