Se ha pensado a menudo que Gregorio Nacianceno fue el maestro de Evagrio. Examinando con detalle las alusiones a este magisterio, nada seguro puede mantenerse. Es más, el elogio de Gregorio deshace esta posible relación maestro-discípulo, al ser Gregorio el agradecido a la benevolencia de Evagrio.