Sin duda, la más importante de todas es la atribuida a san Gregorio de Nisa.
Las restantes se contienen: en el capítulo referente al Taumaturgo que Rufino nos transmite en su traducción latina de la Historia eclesiástica de Eusebio; otra también latina; la cuarta es siríaca, y la última en armenio. Existen igualmente otros datos biográficos de nuestro autor esparcidos en las obras de distintos escritores antiguos y en la más diversa literatura.