PHILIPON Marie-Michel, La Trinidad en mi vida

 La Trinidad es lo Único necesario, el Valor Supremo, que fija cada cosa en el lugar que le corresponde dentro del universo. Lo que se pone en juego en toda vida humana es la Trinidad ganada o perdida para siempre.
La historia del mundo es un drama de redención; para unos se acabará todo con la visión de Dios, para otros con una desesperación eterna. De este modo lo ha juzgado San Juan, bajo su verdadera luz, en una reflexión tras tomador a. Cristo murió «no solamente por una nación» sino para «agrupar en la unidad a todos los hijos de Dios dispersos».
Jesús mismo nos dio sobre este punto capital la luz definitiva en su última plegaria: «Padre, que todos los hombres sean consumados, en nosotros, en la unidad.»