GONDRAND FRANÇOIS, Al paso de Dios

Muy de mañana, un joven sacerdote de veintiséis años está celebrando la Santa Misa en la Capilla de la planta baja de la Casa de los Misioneros de San Vicente de Paúl, en la madrileña calle de García de Paredes. Es uno de los seis sacerdotes que están haciendo unos ejercicios espirituales, comenzados dos días antes en dicha Casa.
Ese día la Iglesia celebra la fiesta de los Santos Ángeles Custodios, como lo recuerda la liturgia de la Misa: la colecta, la epístola -«Mira que enviaré al ángel mío para que te guíe, y guarde en el viaje, hasta introducirte en el país que te he preparado.