RATZINGER JOSEPH Verdad, valores, poder
El Oratorio de Navidad de Bach, la música de Anna Lockwood, las albas figuras de
Zurbarán, la pintura de Pollock, el western o la pornografía. La igualación
estética ha arrasado con los valores artísticos. El prodigioso Dostoïevski fue
de los primeros en vislumbrar el eclipse de la belleza. «La idea fundamental,
dice sobre su novela El idiota, es la representación de un hombre
verdaderamente perfecto y bello. Todos los poetas, no solo de Rusia sino
también de fuera de Rusia, que han intentado la representación de la belleza
positiva no lograron su empeño, pues era infinitamente difícil. Lo bello es el
ideal; pero el ideal, tanto aquí como en el resto de la Europa civilizada, ya
no existe. Solo hay en el mundo una figura positivamente bella: Cristo». Dostoïevski
conserva su vista aguda cuando Europa la ha perdido. Con ojos de lince capta de
una tacada el valor y su fundamento.